domingo, 14 de septiembre de 2008





Espiar a su pareja...


En nuestro trabajo de consulta como terapeutas familiares y de pareja nos hemos encontrado con infinidad de casos de parejas a punto de divorciarse por problemas causados por el revisar el celular del cónyuge..

Pese a que reprueban la práctica de la revisión de teléfonos móviles y mails, la gente admite haberlo hecho; dan hasta consejos para no ser cachados en la 'movida'.Es una realidad lamentable.

Algunos dicen que las relaciones se fundamentan en la confianza, otros dicen que es una práctica común y otros más lo aceptan sin empacho y hasta lo recomiendan, lo cierto es que la costumbre de urgar en los correos electrónicos o en celulares del novio o esposo es de lo más común, o eso fue lo que los usuarios de EL UNIVERSAL (periódico de circulación nacional en México) revelaron en un foro sobre el tema.
Que la confianza es la base, piedra cimentadora de las relaciones, que es una falta de respeto... pero la práctica que algunos reprueban a otros los ha salvado hasta de casarse y ser los cornud@s.
"Un día al filo de la media noche, cuando ya estábamos dormidos.. suena su celular, veo que lo revisa y no contesta, vuelve a sonar 2 o 3 veces más y él termina apagando el celular... obvio no pude dormir y en la mañana en cuanto se levantó descubrí que las llamadas eran de una monita de su trabajo, ahí comenzó el infierno que yo misma me cree... efectivamente tenían una relación pasajera, pero ella no estaba dispuesta a perderlo, en fin.. creo que estuvo bien por que me di cuenta de quien era él y de sus alcances. Definitivamente lo volvería a hacer a quedarme pensando ‘quién fue' y que me sigan viendo la cara", relata una participante del foro.
Otros más opinan que "le que busca encuentra. No sean curiosos(as). La oportunidad de ser fiel o infiel, está en la misma proporción del sujeto que lo fomenta o lo mantiene. Es ley natural".
Un usuario, según contó, terminó con su pareja por esa razón. ""Yo si admito, leí el correo de mi ex esposa y fue lo mejor.. en sí, nosotros ya traíamos problemas desde antes... un día vi su máquina con su correo abierto y la curiosidad mató al gato (o a ella) ya que me enteré de muchas cosas las cuales salvé, algunas imprimí y que incluso me ayudaron a que ella no se negara a darme el divorcio ya que no tuvo cara. En mi caso sirvió. Eso sí, muy duro y extremadamente difícil aceptarlo.
Para ciertas personas, un celular, un mail o la computadora misma es un artículo de uso reservado e indignados, les reprocharon a todos aquellos que, ufanos, aceptaron haber revisado mensajes.
"Meterte en el celular, la compu o la agenda de quien sea es una falta de respeto", e incluso, culparon de las "sorpresas" y revelaciones a los curiosos. "Si te das un tope contra la pared tú te lo buscaste".
En el foro, hubo hasta quien dio consejos para que nos los cachen en la ‘movida'. "Todos en algún momento hemos tenido cola que nos pisen, aunque sea chiquita. Solución: Borren sus mensajes y abran otra cuenta de correo ah!! y no sean mensos, nunca de los nuncas hagan esas llamadas desde sus casas. Digo, si lo van a hacer, háganlo con inteligencia!"
Negado o aceptado, con consejos o reproches, revisar celulares y correos es más frecuente de lo que se piensa y por lo tanto, las sorpresas son mayúsculas.